sábado, 30 de junio de 2012

Pepitas del Océano... o la historia de un Showcooking en suelo francés


   El jueves tuve una cita en la embajada de Francia… si señores, Sushi de Jamón, ha pisado durante unas horas suelo francés, un lujo. El motivo fue la presentación en sociedad de las “Pepitas del Océano” (crepidula fornicata… vaya nombrecito) un caracolillo que sobretodo crece en las costas de bretonas, especialmente en la bahía del Monte Saint-Michel.



   Estas pepitas del océano tienen un sabor nuevo un tanto particular, con un alto contenido en glutamato monosódico, se le relaciona con el quinto sabor, el Umami (estoy segura de que todos vosotros conocéis el quinto sabor, pero os lo pongo para reforzar conocimientos); tiene una consistencia tierna y suave, a mi me recordaron un poco a los berberechos. En cuanto al sabor se podría decir que está a caballo entre el mejillón y la vieira.

   La breve presentación corrió a cargo del periodista y crítico gastronómico, José Carlos Capel y el showcooking vino de la mano de Thierry le Baut y de Rodrigo de la Calle. Particularmente, y como "fans" total que soy de Rodrigo de la Calle, me hacía más ilusión verle a él en acción, pero hizo sus elaboraciones entre bambalinas (pero salió a servirnos uno de los platos) y el espectáculo en directo lo ofreció Le Baut.

 

En total, entre los dos cocineros, pudimos probar seis elaboraciones con las pepitas del océano de base. Las de Thierry le Baut:
·    Ceviche: Pepitas del Océano, Tomate, Mango, Cilantro, Limón y Sal. Resultado: buenísimo, el puntito crudo del marisco y el cilantro estaban estupendos
·    A la andaluza: para mi gusto… sin pena ni gloria
·    Al ajillo: Normalito, ningún sabor excepcional


Como veis, y como loca de lo crudo, aquí ganó en Ceviche.
Rodrigo de la Calle:
·   Pepitas con Salsa Verde: No se si era la salsa, los germinados, las pepitas o todo junto, pero se lleva sin duda la nota más alta. Increíble.
·   Marmitako: El ganador de la tarde, excelente.
·  Arroz a Banda con Pepitas y Alioli: El arroz estaba bien hecho, en su punto, pero no tenía mucho de especial. Lo siento Rodrigo, soy más fans del arroz de mi chico XD



Tres de seis; la mitad, no está mal. Pero como podéis ver estos animalillos marinos son de lo más versátil. Y además de poder hacer un montón de elaboraciones con ellos, también se pueden encontrar en formatos ya preparados, eso si, de esta forma solo estará disponible en el mercado francés. Sobre el precio tampoco puedo decir nada, pero si quieren introducir un producto nuevo tal y como está la economía de nuestro país ya lo pueden poner asequible, porque si no podría empezar a dudar de su éxito.


Quiero agradecer a Roberto Díez, el que haya tenido la amabilidad de invitarme al showcooking. En dos días más recetas...

jueves, 21 de junio de 2012

Saquitos de Verduras y Salsa de Piquillos... o como Rescatar una Cena

   Bueno, me ha costado, pero después de un mes aquí estoy de nuevo. No me ha pasado nada especial, y os agradezco un montón los mails preguntando por mi; simplemente que esta vida moderna me tenía absorbida. El curro, los cursos,la niña, el calor... imaginaos, una locura de la muerrrrte de la que necesitaba un relax.

   Pero bueno, dejando atrás el cansancio, a nuestra querida Prima y su amigo el Riesgo, y todas estas cosas tan estupendas que nos rodean últimamente vamos a poner un poco de color. Además ya llega el verano y es lo que pega.


   Con esto de estar en posesión de una vida acelerada, el otro día abrí la nevera y ¡¡HORROR!!, la desolación más absoluta reinaba en ella, una lastima...; mi nevera si que necesitaba un rescate, y no bankia. Pero había cuatro ingredientes que juntos hicieron una cena estupenda en cuestión de minutos.



  • Hojas de Pasta Filo (de esas que te quedan en la nevera a punto de secarse)
  • Una Cebolleta
  • Un Diente de Ajo
  • Un Pimiento Rojo
  • Un Calabacín (o medio, lo que quede)
  • Hojas de Albahaca (de mi huerto urbano)
  • Una Bola de Mozzarella Fresca
   Para la Salsa:


  • Pimientos de Piquillo (los míos estaban a puntito de fallecer, flotando en un tupper)
  • Media Cebolla
  • Dos Dientes de Ajo
  • Un chorritín de vino blanco (chorritín es una nueva medida, un chorrito pequeño)
  • Nata (al gusto, yo eché como dos tazas de café)


   Precalentamos el horno a 180º.  
   Comenzamos cortando la verdura en bastones, y el ajo en laminas finitas. Lo salteamos, con poco aceite, en una sarten a fuego medio, hasta que estén al dente. Salpimentamos.
   Mientras podemos ir cortando en trozos desiguales la mozzarella.
   Cuando tengamos lista la verdura, la apartamos en un plato llano, bien extendida para que se enfríe un poco.
   Cogemos dos hojas de pasta filo, y si son muy grandes lo cortamos hasta adaptarlo al tamaño de los saquitos que queremos hacer. En el centro colocamos un poco de la verdura (con la menor cantidad de grasa o líquido que se pueda, para que no se rompan las láminas), que ya estará templada. Encima ponemos un poco de mozzarella y unas hojas de albahaca. Cerramos los saquitos levantando los picos de las hojas y cuando estén todos juntos, presionamos en el centro. Se mantiene sin problemas, pero si no, los podéis atar con un cordel o con unos tallos de cebollino.
   Los metemos al horno 10 min, o hasta que pasta esté bien dorada. No lo pongais en la parte alta del horno, porque se puede quemar
   Con los saquitos ya en el horno, vamos haciendo la salsa de piquillos. Rehogamos bien la cebolla y el ajo. Cuando empiecen a tomar un color tostado echamos  los piquillos en tiras. Les damos unas vueltas y añadimos el chorritín de vino y, en cuando reduzca un poco, la nata. Cuando espese lo pasamos al vaso de la batidora y trituramos. Reservamos.
   Una vez estén los saquitos, los emplatamos con la salsa de piquillos. Si lo acompañamos con una ensalada de tomate, mozzarella y albahaca, triunfáis. Y si además ponéis un vino blanco bien fresquito, os ganáis una ovación con su ola y todo.



Las fotos no están muy bien, pero aun estoy con las prácticas del curso de Jackie Rueda... espero ir mejorando.